Las amistades suelen tener efectos en varias áreas de la vida de nuestros hijos, los estudios, uso del tiempo, y cómo se comportan en lugares públicos. Los muchachos que tienen dificultades para formar amistades casi siempre tienen un nivel más bajo de autoestima, no se destacan tan bien en la escuela, a veces no terminan sus estudios, y pueden caer en la delincuencia además de padecer de una variedad de problemas de conducta al llegar a adultos.
Todos los seres humanos tenemos necesidad de sentirnos aceptados y esa necesidad puede llevar a nuestros hijos adolescentes a hacer aquellas cosas que le hemos enseñado que no son correctas, pero para sentirse aceptados como amigos o en grupo, ceden a realizar lo que saben que no es bueno para ellos, llevándoles a participar en actividades peligrosas o delictivas. Es tan preocupante el hecho de las malas amistades que hoy a través de las redes sociales podemos ver que la influencia mayor de nuestros jóvenes en muchos casos no proviene de los padres sino de los que llamamos “amigos en Facebook o Twiter” o text message, es curioso y todos los padres deberíamos de sentarnos a pensar cuando comienza ese desprendimiento psicológico de nuestros hijos, aunque geográficamente estemos en el mismo lugar que es nuestra casa, si observamos la gran influencia que tiene las redes sociales, es para ponernos en guardia antes de que sea mayor el problema, en muchos casos vemos que aparecen por ejemplo 1.355 amigos en la red social y en la mayoría de los casos los padres no somos partes de ese número de amigos, y lo más irónico del caso es que le mandas a tu hijo una petición de amigo y entonces no te aceptan.
Ahora quiero decirles que como padres debemos tener la convicción de que los amigos no sustituyen a los padres, por lo tanto si usted se esfuerza en ser una persona cercana a su hijo adolescente logrará acortar la distancia que permite que otros lleguen a influenciarlos, y conozco casos de jóvenes que llegan a pensar que ellos no nacieron para ser heterosexuales y una gran confusión comienza en sus vidas llevándoles a tomar malas decisiones en su identidad sexual debido a la influencia de “amigos o amigas” que tienen problemas en esa área.
Aquí le dejo algunos consejos para guiarle mientras ayuda a su hijo a formar buenas amistades:
1.- Conozca a los amigos de su hijo.
Hágase amigos de los amigos de sus hijos, invítelos a que venga a su casa y escúchelos y este atentos a las conversaciones entre ellos, pues la Biblia nos advierte que malas conversaciones corrompen buenas costumbres.
2.- Conozca a los padres de los amigos de su hijo.
No se deje impresionar por las apariencias, no piense que porque los amigos de sus hijos son unos profesionales exitosos eso es para usted seguridad, en mi consejería he podido atender a personas destacadas en lo profesional que tienen un monstruo oculto en su mundo interior; y entre ellos pueden estar los amigos de sus hijos, nadie sabe lo que pasa en oculto en la vida de muchas casas, por lo tanto conozca a los padres de los amigos de su hijos y será un buen medidor de relaciones.
3.-Digale la importancia de tomar buenas decisiones en ausencia de ellos
Déjeles saber a sus hijos que la mejor manera de mostrarnos que nos aman como padre es cuando tienen que tomar decisiones en los cuales no estamos presentes, dígales que cuando estén solos con sus amigos allí es donde descubrirás que tan importante es lo que mis padres me enseñan, si algo te parece malo es porque lo es.
4.- Enséñele cómo salirse de las situaciones peligrosas.
Pregúnteles a su hijos que harían si unos de los amigos les ofrecen drogas? Como lo manejarías?; Déjele saber que las pasiones sexuales pueden encenderse y llevarles a hacer lo que no han planeado, pregúnteles que harían si algunos de sus amigos les dice que nos quitemos la ropa para tomarnos unas fotografías?, Que harían?. Las respuestas de sus hijos le ayudarán a ver su manera de manejar las amistades.
5.- Enséñele a respetar a Dios y su Palabra.
No crea que solo llevarlos a la iglesia es suficiente, tome tiempo a solas con ellos para enseñarles a amar a Dios, a saber que vivir sin Dios es vivir incompleto, que solo Dios puede llenar el vacío con el que El mismo nos creó.
Quiero terminar la columna de hoy diciéndoles que amigo no es cualquiera, que un amigo es aquella persona que anhela que nos vaya bien, que lo demuestra con hechos, y se alegran cuando saben de nuestros logros, y que usted sabe de qué sabe que no está deseando su destrucción en sus pensamientos.
Pastora Yajaira Massi
Ministerio Restaurando La Familia