“Y de la costilla que Jehová Dios tomó del hombre, hizo una mujer, y la trajo al hombre” Génesis 2:22 (RVR1960)
Es poderoso para una mujer cuando descubre la calidad con la cual Dios la ha creado, el entender a través de las escrituras el plan para el cual fuimos formadas y la identidad que tenemos como hijas; esto descorre una cortina de oscuridad que el enemigo coloca en la mente y corazón de muchas mujeres que caminan sin propósito y objetivos claros, mujeres que no tienen una visión de quienes son verdaderamente en Cristo Jesús.
Y es que muchas mujeres en mis conferencias se acercan a preguntarme si realmente Dios tiene planes y propósitos con ellas, cuando me abordan, observo en sus palabras y rostros esa inseguridad de creer que nuestro Padre Celestial verdaderamente tenga algún objetivo personal con ellas, y me dicen: ¿Qué planes puede Dios tener conmigo? Sus expresiones van más allá afirmando: Pastora Massi: “si usted supiera cómo me siento, llegue a esta conferencia derrotada”; “mi caminar en la vida ha sido derrota tras derrota, es que usted no sabe de donde yo vengo, ni se imagina lo que yo he sufrido”; entiendo que esta afirmación es cierta ya que desconozco la historia de muchas de estas mujeres, ciertamente muchas de nosotras venga de pasados oscuros y sombríos y el recorrido haya sido de abusos, fracasos y traiciones; pero lo extraordinario y milagroso es que Dios quien está interesado en salvar, sanar, restaurar y edificar, y que si sabe perfectamente de dónde venimos, quiere que descubramos que para El lo importante no es ese pasado triste recorrido que nos atormenta; a nuestro papito bueno no le importa de dónde tu y yo venimos, a Él lo que le importa es hacia dónde nos dirigimos; a Dios le importa que encontremos el enfoque correcto que nos lleve al destino final, centrando nuestra puntería en el blanco del propósito divino; así que la decisión de tomar control de nuestro futuro está en nuestras manos para ponerlo dentro del marco de la voluntad de Dios, lo que quiero decir con esto es que cada mujer es responsables de no abortar el plan de Dios en su vida, independientemente del equipaje que traiga.
El haber descubierto que mi Padre Celestial nos ha creado especiales y extraordinarias, me lleva a la meta ministerial de ayudar a muchas mujeres a vivir en plenitud, que puedan disfrutar de su rol como mujeres piadosas, esposas, madres, hijas, hermanas y amigas, y ser en esta sociedad portadoras de las buenas nuevas de salvación como embajadora de Jesucristo; convirtiendo las verdades liberadoras de la Palabra de Dios en nuestras vidas en un eslabón para proclamarle a otras mujeres, como las de mis conferencias, que pueden ser diferentes, que pueden marcar un pauta distinta en sus corazones, que sus historias tristes pueden ser cambiadas por amor, respeto, fuerza y dignidad; diseñadas por el creador con dones, capacidades, habilidades, inteligencia, bendecidas para bendecir a los que están a su alrededor.
Así que mi enfoque en estas líneas es que como mujer el hueco en el vacío de cada corazón formado por las malas experiencias, sea cerrado y llenado por el amor de Cristo y que puedas encontrar un sentido de pertenencia de lo que verdaderamente eres como creación y que logres internalizarlo y hacerlo parte de ti y puedas experimentar una verdadera libertad en Cristo Jesus.
Pastora Yajaira Massi
Autora del Libro Un Hueco en el Vacío
Ministerio Restaurando La Familia